Los Acuario son seres profundamente apasionados. Por su naturaleza, debido a sus actitudes sociales y relaciones, suelen ser personas que atesoran gran número de relaciones sentimentales o personales. Es en el momento de contraer un compromiso firme con otra persona cuando abandonan tales aficiones.
Un Acuario siempre estará listo para el romance o el sexo. Son personas abiertas mentalmente y tolerantes con todo tipo de inclinación y prácticas sexuales. Para un Acuario, el sexo es, además de entrega, una manera de expresarse con el cuerpo de uno en el otro. De tal manera que una caricia es considerada por muchas personas pertenecientes a este signo, una prolongación de uno en el otro.
Son personas muy sensitivas, seductoras, románticas e imaginativas. En su desaforado hedonismo, complacer sexualmente a un Acuario puede ser una tarea complicada; para ello, para complacer a un Acuario en un contexto sexual debemos tener mucha imaginación y estar dispuestos a hacer cosas que para dicho Acuario pueden resultar excitantes o morbosas.
Quizá el sexo para un Acuario es entrar en otra dimensión, donde no existen reglas. Tan solo el necesario respeto y el olvido del decoro. Es, junto al signo de capricornio, una concepción sobre el sexo y las relaciones personales muy singular y quizá discutible la que presenta Acuario.
Debemos ser conscientes que los preceptos morales o las normas sociales quedan en un segundo plano para los Acuario, dentro del mundo del sexo y las relaciones personales. Quizá para una persona del signo que nos ocupa, prima lo personal, lo humano y lo sensitivo frente a la norma o las convicciones sociales.
En este sentido son personas que tienden a romper con las cadenas morales y la posible hipocresía social.
En el amor, la personalidad de Acuario sufre una metamorfosis radical. Igual que el agua puede adaptarse a cualquier situación y terreno, la personalidad de un Acuario puede sufrir la misma metamorfosis.
Una vez que la persona Acuario a entregado su corazón y su confianza, podemos hablar de una nueva persona que tiende a sublimar el afecto, el amor y los sentimientos a todos los ámbitos de su vida. Es cierto que para un Acuario el sexo, dentro del matrimonio es algo importante, sin embargo también valora su hogar, su fidelidad y su estabilidad emocional a través de la persona amada.
Acuario en el amor y el sexo
Observamos así, la eclosión de una nueva persona, de un nuevo Acuario excelente esposo e inmejorable padre de familia. En este contexto, un Acuario valora la tranquilidad de la vida familiar y todas sus dotes sociales y relacionales quedan circunscritas a un pequeño círculo de amigos a su propio entorno social y familiar.
Quizá, como punto negativo en este nuevo contexto conyugal, podemos decir que, una vez se encuentran comprometidas, las personas Acuario, tanto hombres como mujeres, tienden a ser posesivos y hasta cierto punto celosos. Ello es, según psicólogos y estudiosos del comportamiento a que, determinados grupos de personas, los Acuario entre ellos, presentan especial referencialidad a distintas inseguridades a la hora de comenzar una nueva relación.
Es quizá cuestión de tranquilizarle y hacerle (o hacerla) comprender que el amor no sabe de defectos. Bajo el prisma del cariño, la ternura y la entrega, cualquier defecto aparece como virtud. Es precisamente así como el Acuario debe sentirnos y debe saber que lo amamos: con sus virtudes y sus pocos y pequeños defectos.
De este modo podremos disfrutar del amor de nuestra vida, de todo lo mejor que un Acuario puede y es capaz de otorgar a las personas que tienen la suerte de compartir su vida con un ser nacido bajo la casa de Acuario: una personalidad fascinante, activa, inteligente y brillante que es capaz de hacernos sentir especiales y únicos.