El signo de Cáncer determina personalidades muy especiales. Son personas, las nacidas bajo este signo, de gran sensibilidad y volcadas sobre sus sentimientos y la proyección de éstos sobre la persona que ama. Son también personalidades que dan gran importancia al pasado y tienden a vivir, en muchas ocasiones de recuerdos y pasadas experiencias.
Una ruptura equivale a un auténtico drama, en la vida de un Cáncer. Son personalidades que, en muchas ocasiones, tienden a la depresión o a la obsesión.
La primera reacción de una persona Cáncer, bien sea hombre o mujer, ante una ruptura será buscar las causas. Su personalidad no le deja ver más allá del dolor y del drama en el que está sumido a causa de dicha ruptura.
Un Cáncer no tiene capacidad, en momentos de dolor y de malas noticias, para realizar un análisis objetivo de los hechos. El signo del cangrejo tiende a buscar causas en él mismo. La negatividad puede consumirle por dentro y negarle la esperanza de poder sobreponerse con el tiempo.
Es, en este sentido, precisamente, la tendencia a la nostalgia, al recuerdo y a la ensoñación de momentos pasados, factores que no dejan progresar, ni evolucionar la personalidad de un Cáncer. Son terriblemente nostálgicos y tienden a refugiarse en su pasado, acrecentando, aún más, su dolor, su aislamiento y su drama interior.
Para la mayoría de los signos zodiacales es el tiempo quien viene a curar tan profundas heridas. El caso de Cáncer es algo especial. El tiempo, más que sanar, puede incluso acrecentar la herida producida por el desamor.
Es cierto, cuando uno pierde el amor se pierde mucho, pero ello no justifica, para nada, el aislamiento y el tormento perpetuado en el tiempo y en la memoria. Debemos evolucionar y conservarnos a nosotros mismos, más que el recuerdo amado, las sensaciones de haber amado.
Para afrontar una ruptura, un Cáncer necesita una toma de conciencia, un análisis serio y objetivo de la situación y un análisis tranquilo, sosegado y sereno de los hechos que han conducido a tal situación.
Son en estos momentos cuando la persona Cáncer más necesita de otra persona que le guíe y le tienda la mano. Por sí mismo, una persona Cáncer posee una capacidad nula de curarse de la pérdida.
Cómo afronta una ruptura un Cáncer
Para una persona de este signo, no es solo la pérdida de la persona amada lo que se produce, sino que también podemos hablar de una pérdida de confianza en sí mismo, de una soledad que le puede lastimar y del abandono de un proyecto de hogar y familia en el que un Cáncer se puede realizar.
Si eres Cáncer y te ves reflejada o reflejado en estas palabras, debes asumir la perdida y concienciarte de que las cosas ocurren por algo. El final de algo, por doloroso que sea, puede ser el principio del comienzo de otra cosa. Es precisamente en el cultivo de la esperanza, con el paulatino abandono del dolor y del ensimismamiento, lo que debe hacerte progresar, como persona, como ser espiritual y como hombre o mujer excepcional que merece darse a sí mismo otra oportunidad.
Una persona tan espiritual como un Cáncer tiene la capacidad y la fuerza para encauzar de nuevo su vida. Los del signo del cangrejo son seres altamente espirituales, ellos como nadie pueden y deben encauzar su energía con el fin de lograr sus metas, sus sueños y todas sus aspiraciones. Es tan solo cuestión de ser conscientes de todo el poder interior que uno puede llegar a desarrollar.