Soñadores, sensitivos, fantasiosos, especiales, motivadores, tiernos… estas son solo algunas de las muchas cualidades que un piscis sabe y puede trasladar de su vida pública hasta su intimidad. Quizá la única diferencia entre uno y otro contexto es que en la cama un piscis es capaz de sublimare intensificar los anteriores conceptos hasta el punto de convertirse en un amante excepcional y único.
Es cierto que, a diferencia de otros signos, para un piscis el sexo sin sentimientos es una cuestión que en la mayoría de los casos ni se plantea. No es una cuestión de moral o de preceptos sociales, ya que el signo, por sus características tiene cierta actitud transgresora de dichos conceptos sociales o morales; la explicación radica en el valor que el piscis otorga a los sentimientos, propios y ajenos.
Para un nacido para la casa solar de piscis el sexo sin sentimiento no se concibe. Los piscis necesitan de los sentimientos y del amor para poder entregarse y poder poseer. En este punto, quizá será importante que leas, un poco más adelante el epígrafe de “Cómo conquistar a un piscis”.
Todo lo anterior no significa que la persona piscis no valore el sexo. Es, como ya hemos dicho, un signo sensitivo y emocional. La dualidad que representa este signo suele tender a sopesar la parte sensitiva, emocional y sensual de este signo, frente a lo racional e intelectivo.
Es por ello que podemos decir que para un piscis el amor es, pese a todo, una cuestión esencial en la vida y en la relación personal. Hablamos siempre de un sexo con sentimientos, como ya hemos señalado. Las relaciones personales para este signo se desarrollan en un contexto de amor, sinceridad, intimidad y entrega.
En realidad un piscis siempre busca un alma similar a la de ellos. Estas personas suelen buscar y necesitar casi con carácter de urgencia parejas igual de sensitivas, tiernas, sensibles y soñadoras. Son estas cuestiones esenciales y clave a la hora de seducir a un nacido bajo este signo.
Podemos decir que son excepcionales amantes. Enteramente sinceros, los piscis tienden a ser honestos, claros y sinceros. Es un signo que no solo busca la unión carnal de dos cuerpos que se buscan y se encuentran, buscan y necesitan también la unión de dos almas que se tornan un solo ser. Muchos piscis, por su naturaleza, suelen gustar de practicar el sexo tantrico y distintas disciplinas sexuales orientales e hindúes. Es una personalidad siempre dispuesta a explorar nuevas sensaciones y nuevos caminos de crecimiento personal, junto con su pareja, en cuestiones sexuales.
Piscis en el amor y el sexo
En cuanto al matrimonio y el amor, un piscis es una persona que encuentra su plenitud en su pareja. Son personas muy dependientes tanto física como psíquicamente de su cónyuge. Se dice que cuando un piscis ama, lo hace con el corazón, negando la razón y para siempre.
Quizá como nota negativa podemos señalar que, en no pocas ocasiones, los propios sentimientos, la impronta del corazón y de la fuerza de su amor puede hacer perder el sentido de la realidad en la persona piscis. Pueden surgir determinadas decepciones por no llegar a lo esperado de su pareja o, también, los propios sentimientos pueden ser como una venda que le impida ver otras cosas en el plano de lo real (engaño, mentiras, etc).
Es, además, un signo familiar. Este signo encuentra precisamente, en su hogar y entre los suyos, el contexto ideal para su desarrollo personal y emocional.
Concluiremos señalando que la singularidad que la persona piscis significa y representa en su vertiente social, es trasladada a un contexto íntimo y familiar desarrollando aún mucho más lo emotivo y la ensoñación que solo una persona de este signo es capaz de transmitir a su entorno y hacia su entorno.
Una suerte tener la oportunidad de convivir con una persona piscis, en tiempos como los de hoy, donde los sentimientos y la sinceridad brillan, en muchas ocasiones, por su ausencia.